Nuestros novios son muy diferentes, pero todos tienen algo en común. Y es que en su boda quieren algo único y especial que les identifique. Esto se puede conseguir de muchas formas. Ya hemos visto que a través de la decoración, diseño de la papelería, menú, tarta...etc podemos identificarnos según nuestros gustos y estilos.
Pero hoy vamos a hablar de otra idea que nos mola mogollón. Y que tiene que ver con una de las partes favoritas de la boda por la mayoría, ¡la barra libre! Y es que ¿os habéis planteado tener vuestro propio coctail de boda? No me digáis que la idea no es de lo más chula.
No solo hablamos de tener un servicio de coctelería en directo, que es una pasada, sino además ofrecer una carta personalizada de bebidas creadas por vosotros y con nombres únicos. La idea en España no está muy trillada, aunque en EEUU es una práctica relativamente usual. No hay más que ver a David Tutera, que rara es la boda en la que no mete una bebida alcohólica creada por los novios. ¡Ole tu David!
Si no sabes quien es David Turera es que nunca has pasado un domingo enganchada al divinity...¡porque casi que es lo único que ponen! Así que apúntate en la agenda un domingo de no hacer nada y trágate todos los programas bodiles de David.
Podemos hacer una carta con un diseño que siga el estilo de las invitaciones y estilo de la boda, donde se especifique los tipos de cócteles que se ofrecen. No olvides elegir nombres molones para cada una de las creaciones. Eso le dará un punto aún mas peculiar.
Si lo de crear un cóctel como que no, siempre podéis elegir un cóctel favorito para cada uno (novia y novio) y cambiarles los nombres. Los profesionales de este sector os podrán aconsejar respecto a sabores y otros detalles. Desde luego ¡no dejará indiferente a nadie!
También podréis ofrecer cócteles que no sean líquidos ¡si no en dulces! Como esta gelatina de Champagne, ¿no es genial? Estamos deseando montar una mesa dulce así de adulta, incluyendo cócteles sólidos junto a chucherías y pasteles, ¿alguien se apunta?
Y esto ya va para los amigos de los novios (shhhh no contéis nada y darles una sorpresa), ¿por qué no regalarles un taller de coctelería? Me encanta la idea para una despedida de soltera o soltero diferente, y luego incluir el cóctel creado en la boda ¡manos a la obra!
Yo desde luego me lo apunto, que una boda mola más con Lovejitos que con mojitos !!!!!!!!!!
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