¿Exite el concepto de "novia civil"?

Vamos a estrenar nuestros post sobre moda nupcial con un debate, ¿se debe condicionar el vestido según nos casemos por la iglesia o por lo civil? Y es que hace unos días nos enterábamos de la nueva colección de Pronovias, que a priori nos parece maravillosa. Se trata de una colección con vestidos a partir de 470 euros ¡un olé a los señores de pronovias! Pero...uish....han puesto en la página web que es una colección dirigida según ellos a novias civiles (podéis leerlo aquí)
¡Pero bueno! Señores de Pronovias, desde aquí queremos hacer un comunicado: las novias pueden ir vestidas como quieran, se casen donde se casen. Pero oiga, que un fallito lo tiene cualquiera, y que la colección nos pirra. 

El concepto en sí es chulo. La colección se llama City, ya que son vestidos con texturas ligeras, cortes modernos y muy urbanos. Y sobre todo, precios muy asequibles.

Pero Pronovias no son los únicos que han hecho alguna vez esta distinción. No tienes más que poner en google: novia civil, para comprobar lo que estamos diciendo. Aparecerán muchos vestidos cortos (y me declaro fan de ellos, pero no por lo civil o no civil), cortes simples y modernos. 
Son muchas las novias que hoy en día deciden casarse por lo civil, y eso no debe suponer un límite a la hora de escoger el vestido de novia. Si bien es cierto que antes la cosa era diferente. Si te casabas por la iglesia: vestidazo de princesa con una enorme cola y velo. Ahora, chica, si te casabas en el Ayuntamiento, casi que no debías pasar del trajecito de chaqueta blanco. 
Pero menos mal que de esto hace muchos años (¡yuju!), y ya la cosa va diferente. Cada una se casa donde quiera y con lo que quiera puesto. Pues toma ya, como debe ser. Y yo desde luego no renuncie a mi vestido de princesa (y tanto, porque tul tenía a rabiar) y me case en el Ayuntamiento de Sevilla.

Y es por eso que abrimos el debate...¿ pensáis que una novia debe limitarse si se casa por lo civil? Nosotros desde luego decimos un no rotundo. Porque una es novia novia, sea en la Iglesia o en el Ayuntamiento. Lo único que debemos tener en cuenta es el estilo que nos gusta y de la boda que queremos. 

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