La opción de que vaya pintado sobre la propia madera nos encanta, pero ten en cuenta que los días previos a la boda se pueden caer (o sumar) algunos invitados. Este tipo de seating corren el riesgo de llegar a la boda con algún invitado de más o de menos, ya que al ser pintado a mano debe prepararse con tiempo y no está sujeto a cambios de última hora.
Si lo queréis hacer vosotros mismos sobre metacrilato pero no sabéis hacer lettering ¡es muy fácil! Buscad en internet una tipografía que os guste, imprimid en el tamaño que queráis poner, tanto los números como los nombres ¡y a calcar! Os quedará perfecto.
Eso si, tened en cuenta siempre que el fondo del mismo sea de tonos lisos (por ejemplo una pared de verdes, de ladrillo visto...) para no complicar la legibilidad del mismo. Aunque queramos un seating bonito, no se nos debe olvidar que el último fin es que el invitado pueda encontrarse fácilmente.
También podéis usar un elemento muy en tendencia ahora mismo. Una rejilla en color cobre o dorado, incluso blanco mate, quedará perfecto como base para la estructura del seating, siempre que llevéis una boda con estética romántica moderna. Es fácil de conseguir en tiendas de bricolaje, y la podéis pintar vosotros mismos ¡ideal y muy low cost! Eso si, habla con tu decorador para que os incluya decoración floral en la misma, será lo que le de el punto romántico.
Por último, también podemos usar el seating plan para dar el regalito o detalle al invitados. Siempre que sean detalles pequeños (como especias, una probeta con semillas....), quedará ideal y a los invitados seguro que les encantará.
Y vosotros ¿qué tipo de seating plan vais a escoger?
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